Aunque no es una localidad propiamente dicha, ya que pertenece a Cartaya, esta pedanía tiene un encanto muy particular que lo hace único en la Costa de la Luz. Hay tantas cosas que hacer en el Rompido a la espera de ser descubiertas por el visitante: golf, deportes acuáticos, deportes de aventura… sin olvidar los restaurantes a lo largo de las orillas del río Piedras, donde puedes deleitarte con lo mejor de la gastronomía local.